Olga Bakes: un dulce inicio en la cocina
En 2018, en la tranquila cocina de la madre de Adrián, su novio, nació Olga Bakes. Con una repisa prestada en el refrigerador y el cálido horno de casa, Olga comenzó a hornear pasteles bajo pedido los fines de semana.
Adrián, quien en ese entonces trabajaba en un despacho de abogados, se convirtió en un pilar fundamental para Olga Bakes. No solo proporcionó el espacio para la creación de los pasteles, sino que también se encargaba de las compras y entregas.
Desde sus humildes comienzos, Olga Bakes ha crecido, pero siempre recordando sus raíces. Cada pastel horneado lleva consigo la historia de una repisa prestada y el amor por la repostería que nació en una cocina familiar.
De la cocina de casa al centro de la ciudad
El horno en el patio, un refrigerador en la sala, el resto de la cocina en un cuarto de visitas. Así comenzó Olga Bakes cuando salio de la cocina de mamá. Hasta que el contrato de renta se venció y se vieron obligados a mudarse una vez más.
En medio de la pandemia en octubre de 2020, se plantearon la idea de expandirse más allá de trabajar desde casa. Salieron en bicicleta en busca de un local en el centro para su producción. A pesar de no encontrar un lugar que les convenciera inicialmente, descubrieron un local sin letrero de renta. Contactaron al dueño, visitaron el espacio y firmaron el contrato el mismo día.
“No teníamos ni idea de lo que implicaría abrir un negocio en medio de una pandemia, los retos y aprendizajes fueron muchos, nuestro modelo de trabajo cambió por completo.
Estuvimos en este local durante 3 años, realizando pasteles bajo pedido y vendiendo rebanadas únicamente con servicio para llevar.” Agrega Olga, chef de la repostería.
Un nuevo comienzo en Tres Centurias
Para junio del 2023, su rentero les avisó de un considerable aumento de renta para la renovación del contrato. Fue aquí cuando nuevamente se replantearon todo. ¿Valía la pena seguir allí? ¿Realmente estaban explotando todo su potencial?
Adrián ya sabía de la existencia de los nuevos locales comerciales de las Tres Centurias, en Aguascalientes, y realmente era su sueño tener Olga Bakes allí. Sugirió ir a verlos para cambiarse allá. A pesar del miedo y la incertidumbre, decidieron dar el paso.
Fueron a ver los locales y fue amor a primera vista. Se imaginaron cómo sería Olga Bakes, el potencial que tiene esta zona. Fueron a pedir informes al día siguiente y tomaron la decisión de realizar el cambio.
Este es el comienzo de un nuevo capítulo para Olga Bakes. Un capítulo lleno de posibilidades, crecimiento y deliciosos pasteles. El equipo liderado por Olga y Adrián, cuenta con un equipo conformado por 5 personas trabajando en cocina, además de sus perritos Winston y Otto, quienes le dan un toque de diversión e identidad al proyecto.
Cambio de color y personalidad
Anteriormente, el color principal de Olga Bakes era el morado. Sin embargo, cuando decidieron abrir un espacio para recibir a sus clientes, optaron por el color verde como color principal. Este cambio no fue solo estético, sino que también buscaba crear una atmósfera más acogedora y apropiada para sus clientes.
La idea inicial para la barra de Olga Bakes era utilizar un azulejo verde. A pesar de que el diseño era atractivo, no sentían que reflejara completamente la personalidad de la marca. Buscaban un diseño que capturara la esencia de Olga Bakes y que fuera atractivo para los clientes. Se embarcaron en una búsqueda de inspiración, explorando ideas en internet y esbozando diseños en papel. A pesar de encontrar muchas ideas interesantes, ninguna parecía ser la correcta.
Todo cambió cuando visitaron una fábrica de mosaicos en Aguascalientes, ‘Mosaicos Hidrocálidos’. Se enamoraron de su trabajo y supieron de inmediato que habían encontrado el diseño perfecto para su barra.
“Tenía la idea de utilizar esta imagen de flor pero que no fuera tan textual, es decir, no quería que estuviera el logotipo de Olga Bakes por todos lados, pero si algo que te lo recordara” nos comparte Olga. “En la fábrica de mosaicos vimos que tenían un molde de una flor y supe que sería perfecto”.
Diseño atemporal para un sabor inolvidable
En Olga Bakes, creen en la atemporalidad del diseño. Es por eso que optan por materiales como la madera, sillas de estilo vintage y decoración con plantas. Su objetivo es crear un espacio que sea tan inolvidable y duradero como sus pasteles.
“No somos seguidores de las modas pasajeras. Entendemos que las tendencias vienen y van, y que lo que hoy está de moda, mañana puede parecer anticuado. En lugar de invertir en estilos efímeros, preferimos invertir en calidad y atemporalidad.”
En Olga Bakes, cada detalle cuenta. Desde la elección de los materiales hasta la disposición de los muebles, todo está pensado para crear un espacio que invite a sus clientes a relajarse y disfrutar de los deliciosos pasteles.
Fotografía: Lu Nieva